Diez cosas que no debes hacer en una entrevista

Prepara tu entrevista de trabajo de forma eficaz siguiendo los siguientes consejos.

Todos sabemos que afrontar una entrevista laboral requiere de tiempo de preparación. Resulta complicado enfrentarse a un técnico de selección si previamente el candidato no ha indagado sobre aquellos factores que pueden ayudarle a demostrar que es la persona idónea para desempeñar el puesto ofertado. A continuación te enumeramos diez prácticas que no debes hacer en una entrevista para que aumenten tus posibilidades de ser contratado.

1. No informarte

Nunca acudas a una entrevista laboral sin haberte informado sobre cuestiones relacionadas con la historia de la empresa y su filosofía de trabajo. Lo más probable es que te pregunten por qué te gustaría trabajar para ellos, si conoces su marca o has oído hablar de sus productos, etc. Para recabar esta información tan valiosa, te recomendamos analizar los contenidos publicados en su página web corporativa, así como sus Redes Sociales. Linkedin es la red profesional más grande del mundo y es posible que la empresa que postula la oferta de trabajo tenga una cuenta activa. Puedes utilizar el buscador para hacer un rastreo de las personas que trabajan allí e incluso ponerte en contacto con el técnico de Recursos Humanos que ha publicado la oferta, aunque no te recomendamos utilizar esta vía porque algunos entrevistadores consideran esta práctica como una intromisión o exceso de confianza si todavía no se ha producido el contacto personal.

2. No medir tus gestos

cuando hablamos de cómo ir a una entrevista de trabajo nos referimos al código de vestimenta, la higiene personal o a utilizar los gestos más apropiados al comunicarnos con nuestro interlocutor. Es fundamental conocer los códigos de conducta adecuados a la hora de afrontar una entrevista para evitar ser descartado por errores que podríamos haber evitado fácilmente. Te recomendamos leer este post que incluye consejos para emplear el lenguaje no verbal adecuado.

3. Tener el móvil operativo

Asegúrate de que tu móvil esté apagado o en silencio antes de la entrevista. Si alguien te llama (salvo en caso de urgencia) o recibes notificaciones de mensajes por vibración en mitad del proceso, puede ser percibido como una falta de respeto, además de desconcentrar a la persona que está realizando preguntas. Para evitar distracciones por ambas partes es recomendable que guardes tu terminal en el bolso o los bolsillos.

4. No parar de hablar

Los nervios pueden jugarnos una mala pasada y conseguir que nos quedemos sin habla o provocar el efecto contrario. Debes controlar tu conversación, medir tus palabras, no hablar demasiado deprisa y procurar mostrarte seguro de ti mismo y convencido de tus respuestas. Si tienes dudas, pon en práctica la famosa regla del 50-50, que consiste en que cada una de las partes, el entrevistador y el entrevistado, habla la mitad del tiempo que dura la entrevista.

5. Hacer demasiadas preguntas al comienzo

Es totalmente comprensible que quieras hacer cientos de preguntas para intentar resolver todas las dudas que puedas tener con relación a un puesto de trabajo. Debes saber que preguntar sobre el salario de forma persistente puede suponer un motivo de descarte, ya que el entrevistador considerará que tu interés por trabajar en la empresa es puramente económico. Si te encuentras en una fase avanzada del proceso o has resultado seleccionado, entonces será el momento adecuado de resolver todas las dudas relacionadas con los horarios, el salario y otro tipo de condiciones que deberás valorar antes de aceptar el puesto.

6. No saber explicar tu currículo

El currículo es tu carta de presentación más valiosa en un proceso de selección. Parece sencillo pero muchos candidatos fallan a la hora de explicar la información plasmada en papel con las palabras adecuadas. Es necesario estar preparado frente a preguntas que tengan relación con el contenido expresado en tu CV, memorizar cuáles han sido los puestos de trabajo anteriores, la duración de los mismos o las labores que hayas realizado. Una pregunta muy frecuente es pedirle al entrevistado que resuma su trayectoria profesional y esto es precisamente lo que debería aparecer en tu curriculum vitae.

7. Llegar tarde

En ciertos países como en Reino Unido, la puntualidad es casi un tema de Estado y si un candidato llega tarde a una entrevista de trabajo, es posible que automáticamente sea descartado sin haber siquiera tenido la oportunidad de demostrar sus cualidades. Haz lo posible por llegar unos minutos antes de la hora concertada para la entrevista, teniendo en cuenta factores como el tráfico y la duración del viaje.

8. Hablar mal de tu anterior trabajo

No es conveniente que comiences a criticar a tu ex jefe o compañeros de trabajo cuando te pregunten por tu experiencia en otras empresas. Lo único que conseguirás es demostrar una actitud inmadura e irrespetuosa. En lugar de criticar, céntrate en destacar todo aquello que hayas aprendido, así como los logros profesionales obtenidos.

9. Falsear información personal

No aportes información falsa bajo ningún concepto. Si te preguntan si sabes hacer algo, no mientas, porque tarde o temprano se demostrará si realmente estás o  no capacitado para desempeñar ese puesto de trabajo.

10. Insistir demasiado

Hay procesos de selección que se alargan más de lo esperado y en ocasiones no se informa al candidato sobre si finalmente se ha descartado su solicitud. Trata de ser paciente y evita llamar constantemente a la empresa o bombardear al entrevistador con emails preguntando por la situación del proceso.

Conclusiones

Si buscas trabajo o estás inmerso en un proceso de selección, seguro que estos consejos te ayudarán a entender cómo preparar una entrevista de trabajo de la forma más adecuada. Es importante saber qué no hacer y prepararse con antelación ante las preguntas que puedan surgir antes, durante y después de la misma.